Bodas

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Bodas, como no podía ser de otra manera, es un canto feliz y vitalista de principio a fin. Contiene sutiles elementos lúdicos y es necesario no solo un buen sentido del pulso, sino también familiaridad con síncopas propias de la música pop para conseguir una interpretación fresca

Forma parte, junto a Pasión y Valparaíso, del tríptico Carvajales. La relación fundamental entre estas tres piezas radica en que los tres sonetos alejandrinos sobre los que se basan proceden del primer libro de Antonio Carvajal, Tigres en el jardín, además de que los divisi han sido evitados a propósito para lograr una mayor elegancia y limpieza en el lenguaje.

BODAS

No un arcángel del cielo sino un hombre en la tierra

pronuncia nuestros nombres de torrente y anillo.

Un hombre que se alza y dulcemente yerra

y deshoja una rosa de cáliz amarillo.

Pulsa los limoneros y jazmines y cierra

los crudos surtidores de témpano y cuchillo.

Cantan treinta jilgueros y el pinar en la sierra

y el júbilo amoroso nos regala su brillo.

Blancas palomas siguen el camino glorioso

de nuestro amor ingenuo hasta sus ojos niños

como nidos propicios de fervor y reposo.

Ciñe tu anillo de oro mi caz y cuando todas

las estrellas acunan ángeles lampiños

Sirio, can y lucero se enarca en nuestras bodas.

(Antonio Carvajal)